Saliendo de mis 40!
Recientemente una amiga que conozco desde niñita hizo una reflexión pública sobre las cosas que aprendió. Este será su último año en sus 20.
Este es mi último año en mis 40. Consideren esto como un breve reflejo de algunas cosas que he aprendido o que se me han recordado:
Habrá muchas primeras y muchas últimas.
Cuando sanas viejas heridas, aparecen otras nuevas, pero al igual que las viejas heridas, las nuevas sanarán.
¡Me encanta enseñar a los niños en edad preescolar!
¡Me encanta ser Life Coach!
Una balanza no me dice si estoy sana.
La terapia siempre es oportuna
¡Si puedes pagar un Life Coach, consiga uno!
No hay vergüenza en tomar medicamentos con fines de salud mental.
Después de años de pensar que estaba tomando la decisión correcta, puedo aprender en un día que no era así.
El aislamiento emocional es una olla que cocina muchos comportamientos poco saludables.
Algunos días me siento hermosa, otros días no tanto.
Compararme con los demás me impide disfrutar mi vida.
Nunca es tarde para tener un color favorito. Nunca he tenido un color favorito y para mi almuerzo de cumpleaños mis amigas, sin planearlo (incluido yo mismo) estaban vestidos de azul, ¡así que decidí que el azul es ahora mi color favorito!
Mi cuerpo no se cura tan rápido como solía hacerlo.
A veces se necesita una década diciéndome la verdad antes de que pueda creerla.
Cómo me siento no determina quién soy.
No puedo permitirme el lujo de no programar tiempo personal de refrescarme.
No puedo culpar a nadie más por las decisiones que tomo. Soy una mujer adulta.
No siempre "sentiré" ganas de negarme a mí misma, pero por eso se llama abnegación.
En nombre del amor, tomo decisiones tontas, también tomo decisiones muy buenas.
Después de más de dos décadas de vivir el camino del Evangelio, diré que no es el camino fácil, pero es el único camino transformador consistente.
Cuando finalmente hice las cosas que estaba posponiendo por una o otra razón, respondí de la misma manera: "Ojalá hubiera hecho esto antes".
Todos tienen una historia, así que no seamos rápidos a juzgar.
Tengo un jardín de amigas de temporada. Los recuerdos que construimos esa temporada durarán toda la vida.
Será mejor que me acostumbre a decir: "lo siento, por favor perdóname"
Mi voz importa.
Lo desconocido no siempre da miedo.
Me siento muy cómodo jugando a lo seguro y Dios lo sabe.
Descubrí lo que significa “picar” mi bebida no alcohólica. Una larga historia.
¡Dios todavía está en el proceso de construir la historia de mi vida!
Si es la voluntad de Dios que disfrute de otra década completa de vida, estoy lista y si me doy cuenta de que no lo estoy, bueno, estoy comprometida a seguirlo incluso si a veces estoy pateando y gritándome el camino .
Me animo mucho hacer esto! Te animo a que lo hagas si deseas
Lucas 18:27!