Me lastimé el pie el año pasado. La lesión me llevó a pasar de caminar 2-3 horas a menos de 10 minutos. Necesité meses para caminar por 20 minutos sin una tobillera. Todavía necesito usarla si voy a caminar por más de 20 minutos. Estaba muy desanimada porque parte de mi rutina diaria y mi cuidado personal incluían caminar o trotar todos los días.

Un día decidí que necesitaba hacer algo físico. Mi hija me presentó un video de ejercicios de 30 minutos. Tres veces a la semana, sigo el video para hacer ejercicio. Decidí ponerme la meta de trabajar para aumentar los pesos y ver cuánto peso puedo levantar después de un año. Nunca he disfrutado del entrenamiento con pesas, me encanta el cardio. 

Comencé con 5 libras de peso en febrero y apenas pude terminar el video. A medida que continuaba con mis entrenamientos, noté que no me faltaba tanto el aliento como antes, así que decidí aumentar a 10 libras en uno de los tres días de mis entrenamientos. El viernes 4 de junio,  aumenté a 20 libras en uno de los días. Como todas las demás veces que aumenté el peso, me quedé sin aliento al final del entrenamiento; sin embargo, por alguna razón, me sentí muy feliz por ello. Tal vez fue porque no puedo esperar hasta poder levantar 20 libras durante los tres días. O tal vez fue solo el hecho de que lo he mantenido constantemente durante cuatro meses y he encontrado una manera de convertir algo que necesitaba en algo que estoy comenzando a disfrutar.

A veces tenemos que cerrar un capítulo de la vida de forma inesperada. Es triste cuando eso sucede. Sin embargo, puedes encontrar nuevas metas, nuevas visiones para comenzar a escribir un nuevo capítulo y mantenerte motivada en tu meta.

No hago ejercicio para verme en forma (dejé eso hace mucho tiempo); Lo hago porque los médicos, los profesionales de la salud y mis amigos que invierten en su salud física dicen que es bueno para mi salud en todo los aspectos. Mi objetivo es hacer lo mejor que pueda en el cuidado de mi salud, por lo que vale la pena encontrar la manera de mantener el compromiso con este objetivo, incluso si debo cambiar la ruta para llegar allí.

Averiguar el objetivo puede ser la parte difícil; sin embargo, una vez que ajuste la forma de alcanzarlo, será mucho más fácil seguir adelante cuando una forma ya no sea una opción de alcanzar ese objectivo.

“Donde no hay visión, el pueblo se extravía; ¡dichosos los que son obedientes a la ley!” Proverbios 29:18.

Mantenga el objetivo, a pesar de que a veces necesitamos cambiar como llegar hacia el destino.