El recordatorio de hoy es corto pero es una de esas cosas que Dios me señala que me pega profundamente. Mientras leía las oraciones y las cartas del pasado que estoy usando para este proyecto hay una declaración que dije a menudo. Desde 1996 hasta principios de la década de 2000: " haz lo que sea necesario ". Me recordó que necesito orar y pedirle a Dios que haga lo que sea necesario para que crezca espiritualmente.

Los siguientes son tres extractos.

1- “Gracias por Jesús y su ejemplo que me comprometo a hacer todo lo posible para seguirte Dios en todos los caminos que voy: y si notas en algún momento que olvidé mi promesa, haz lo que sea necesario para recordármelo nuevamente”. 

 2- “Padre, haga lo que sea necesario para que me despierte en la mañana. No quiero ponerme cómoda con la idea de que como soy ama de casa, puedo tener mi tiempo contigo en cualquier momento del día. Te quiero, necesito que estés en el comienzo de mis días para que pueda estar equipada, llena y cerca de ti mientras enfrento el día, mientras enfrento el mundo". 11 de noviembre de 1998.

3- "Rezo para que mi objetivo en la vida sea siempre complacerte, y rezo para que cuando ese no sea mi objetivo, hagas lo que sea necesario para recordarme el compromiso que hice contigo y conmigo mismo a ponerte primero". 2 de febrero de 2000.

¡Haz lo que sea necesario, Dios! 

¡Gracias por leer!